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Chaz, ya con la satisfacción de ser campeón del mundo digerida -al menos en apariencia-, expresó que "siento que no ha tardado mucho en llegar, pero sí ha costado mucho trabajo". Recordó que "he tenido días buenos y malos desde que estoy en este deporte", pero "se necesita un equipo y una persona para darle la vuelta a los momentos negativos, dicha persona en mi caso es Giuliano Rovelli (jefe del ParkinGO Team), quien me ofreció hace dos años en Imola la posibilidad de correr para él". En aquel momento, "pensaba que iba a ser un paso más en mi carrera, así que cogí la oportunidad y di el máximo", lo que conllevó "buenos resultados el año pasado".

Reconoció que esta temporada, con el cambio a Yamaha, "todo era un poco desconocido", por ello "en las dos primeras carreras las cosas fueron complicadas, no acertamos con la puesta a punto", pero "a mitad de año encontramos una configuración fantástica" y "reducimos la diferencia de puntos con Luca (Scassa)". Davies cree que una de las claves fue ser "consistentes" en ese tramo de la temporada, cuando "empezamos a acelerar a fondo y todo funcionó hasta el último día".

De hecho, "en Silverstone estaba preparado para pilotar con la calculadora y terminar tercero, mejor el podio que una caída, pero resulta que vencí la manga, y después también en Alemania, donde sentí que ya tocaba el título con una mano", aunque es cierto que "las cosas pueden cambiar en un instante". Es por esto que "lo de Imola fue una gran decepción, todo iba perfecto hasta que faltaban cinco vueltas...", pero "por suerte teníamos un buen colchón de puntos y no nos afectó". Ya en Magny-Cours, "cumplimos el objetivo".

Preguntado por qué se siente al ser el ganador entre un importante número de pilotos con potencial de campeón, como los de Honda o Kawasaki, Chaz declaró que "no ha sido fácil, todos han tenido sus opciones y la clave ha sido ser regular, pues ha habido pilotos con un gran fin de semana que luego han pasado desapercibidos en otros". Obviamente, "también gocé de una fantástica moto cada domingo, no hacían falta cambios drásticos sino pequeños retoques dentro de la configuración que encontramos y, por supuesto, no cometer errores en las carreras", concluyó.