Jack Kennedy: "En Aragón no tendré problemas con el tobillo"
El piloto irlandés espera con impaciencia la segunda prueba de la temporada
Jack Kennedy (CIA Insurance Honda) se encuentra aún recuperándose de la lesión de tobillo que sufrió en una terrible caída durante el test oficial de pretemporada en Phillip Island el pasado mes febrero. El piloto irlandés se sometió entonces a una operación quirúrgica tras la carrera para acelerar su recuperación, aunque todavía no se encuentra al cien por cien.
“Mi recuperación está siendo un poco más lenta de lo que esperaba y las sesiones de fisioterapia están resultando muy dolorosas. La razón de ello es que el hueso que me fracturé es el de mayor importancia en el tobillo. En 2006 se rompí la tibia, el peroné y el tobillo de la misma pierna, por lo que me tuvieron que poner placas y tornillos que llevé durante un año. Después de la caída en Phillip Island tenía la opción de operarme para tener una recuperación más rápida o no hacerlo y tardar mucho más en estar en forma de nuevo. En esta ocasión sólo han tenido que ponerme dos tornillos en el tobillo”.
A pesar de la lesión Kennedy salió en carrera en Australia, aunque sufrió un problema mecánico en su Honda CBR 600RR que le obligó a retirarse dejando el aceite sobre la pista que supuso la aparición de la bandera roja: “A veces todavía me pregunto qué falló en Phillip Island. Se suponía que no debía haber ocurrido, pero quizá estas cosas pasan para evitar males mayores. Preferí verlo de esa forma y no tomármelo demasiado en serio”.
El piloto que también fuera subcampeón del Británico de Supersport disputará finalmente la segunda prueba de la temporada en MotorLand Aragón, aunque pasará los días que quedan hasta entonces trabajando para mejorar su condición física.
“No vamos ha hacer ningún entrenamiento en pista antes de la carrera”, añadía Kennedy, “pero podré volver al gimnasio y también entrenaré en la piscina. Físicamente me encuentro bien y en Aragón no tendré problemas con el tobillo. Ya camino sin muletas. Sólo tengo muchos dolores cuando voy al fisioterapeuta, tantos que después tengo que tomar calmantes”.